Mari Trini (Murcia, 12.07.1947 - 6.04.2009), fuente: Facebook |
Amores se van marchando
como las olas del mar.
Amores los tienen todos,
pero quién los sabe cuidar.
El amor es una barca
con dos remos en el mar,
un remo aprieta mis manos,
el otro lo mueve al azar.
Quién no escribió un poema
huyendo de la soledad,
quién a los quince años
no dejó su cuerpo abrazar;
y quién, cuando la vida se apaga
y las manos tiemblan ya,
quién no buscó ese recuerdo
de una barca naufragar.
Amores se vuelven viejos
antes de empezar a amar,
porque el amor es un niño
que hay que enseñar a andar.
El amor es como tierra
que hay que arar y sembrar,
míralo al caer la tarde
que no lo vengan a pisar.
Quién no escribió un poema
huyendo de la soledad,
quién a los quince años
no dejó su cuerpo abrazar;
y quién, cuando la vida se apaga
y las manos tiemblan ya,
quién no buscó ese recuerdo
de una barca naufragar.
como las olas del mar.
Amores los tienen todos,
pero quién los sabe cuidar.
El amor es una barca
con dos remos en el mar,
un remo aprieta mis manos,
el otro lo mueve al azar.
huyendo de la soledad,
quién a los quince años
no dejó su cuerpo abrazar;
y quién, cuando la vida se apaga
y las manos tiemblan ya,
quién no buscó ese recuerdo
de una barca naufragar.
antes de empezar a amar,
porque el amor es un niño
que hay que enseñar a andar.
El amor es como tierra
que hay que arar y sembrar,
míralo al caer la tarde
que no lo vengan a pisar.
huyendo de la soledad,
quién a los quince años
no dejó su cuerpo abrazar;
y quién, cuando la vida se apaga
y las manos tiemblan ya,
quién no buscó ese recuerdo
de una barca naufragar.
Amores se van marchando...
Mari Trini, Amores
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