![]() |
El Cristo de las Misericordias o del Bambú (atrib. Salvador de Cuéllar, segunda mitad s. XVI) pasa delante de la catedral de Jaén, foto: Antonio Erena, 18.04.11 |
Luchando, cuerpo a cuerpo, con la muerte,
al borde del abismo, estoy clamando
a Dios. Y su silencio, retumbando,
ahoga mi voz en el vacío inerte.
Oh Dios. Si he de morir, quiero tenerte
despierto. Y, noche a noche, no sé cuándo
oirás mi voz. Oh Dios. Estoy hablando
solo. Arañando sombras para verte.
Alzo la mano, y tú me la cercenas.
Abro los ojos: me los sajas vivos.
Sed tengo, y sal se vuelven tus arenas.
Esto es ser hombre: horror a manos llenas.
Ser —y no ser— eternos, fugitivos.
¡Ángel con grandes alas de cadenas!
Blas de Otero, «Hombre», Ángel
fieramente humano (1950)
No hay comentarios:
Publicar un comentario