lunes, 11 de noviembre de 2024

Otoño 6 - Gastromanía 46

Membrillos, foto: Antonio Erena, 08.11.24
Es de color amarillo, como si llevase una túnica de narcisos, y huele como el almizcle de penetrante aroma.

Tiene el perfume de la amada y su misma dureza de corazón; pero tiene el color del amante apasionado y macilento.

Su palidez es un préstamo de mi palidez; su olor es el aliento de mi amiga.

Cuando se irguió fragante en la rama y las hojas le habían tejido manos de brocado,

extendí mi mano suavemente para cogerlo y colocarlo como pebetero en el centro de mi sala.

Tenía un vestido de pelusa cenicienta que revoloteaba sobre su liso cuerpo de oro.

Y cuando quedó desnudo en mi mano, sin más que su camisa de color narciso,

me hizo recordar a quien no puedo decir, y el ardor de mi aliento lo marchitó entre mis dedos.

Yaáfar al-Mushafi (siglo X), «El membrillo», en La cocina de al-Andalus, Inés Eléxpuru, Alianza Editorial. Madrid 1994.

jueves, 7 de noviembre de 2024

miércoles, 6 de noviembre de 2024

Gemela

Lápida romana de Cassia Montanilla, monasterio de Ntra. Sra. de la Piedad, Torredonjimeno, foto: Antonio Erena, 06.11.24

CASSIAE. A. F. MONTANILLAE

COLONIA  AVG. GEM.

DECRETO DECVRION.

    [Sac.] Esta Señor Cura, es la piedra que yá he dicho, que tenía reservada, para en llegando este caso; porque con ella se cierra, y corona el edificio á toda perfección, sirviendo en su frontispicio, ó fachada principal, como un Escudo de Armas, que indica sus excelencias y sus más antiguos timbres: Pues se halla en Torreximeno diciendo publicamente, que tuvo esta ilustre Villa, no menos que la de Martos, los honores de Colonia, con su renombre Augusta, y dictado de Gemela: que es la prueba mas fuerte y eficaz, que se puede apetecer, de que las dos hacian una en tiempo de los Romanos, de lo que se originó el plural Tucci Tuccorum, con que los mismos Romanos la nombraban en su lengua, y que quando le añadieron la excelencia de Colonia, le dieron el dictado de Gemela, para expresar la hermandad con que hallaron las dos Villas, en cuya atención hicieron la Colonia de las dos, aunque están algo distantes materialmente entre sí, que es puntualmente todo el concepto de mi idéa: por lo que yá me parece que la tengo concluida, y sin que le falte cosa de quantas el arte pide, desde el cimiento al remate.

    Cur. No hay duda que lo estaria con esa ultima piedra, que pretende ponerle por remate, si le hubiera hecho las informaciones de no ser advenediza, sino original y propria del mismo Torreximeno; o que se halló en sitio fixo, que quite toda sospecha de que pudo ser llevada del mismo pueblo de Martos, quando se fundó el convento. Lo que es muy verisimil sucediese; yá porque no era difícil, atenta la inmediación que tienen los dos pueblos entre sí; y yá por la certeza que tenemos de que la Villa de Martos obtuvo los honores de Colonia con los renombres de Augusta Gemela, que son los que se ven en dicha Lapida; por lo que es muy verosimil que la lleváran de ella. Si esto sucedió así, como es de sospechar que sucedió, queda descoronillada enteramente su Obra; pues se le cae esa piedra sin poderse tener en su lugar.

Fray Alejandro del Barco, Las colonias gemelas, Imprenta de Blas Román, Madrid, 1788, ed. facsímil, Gráficas la Paz, Torredonjimeno, 1982, págs. 223 y 224.

martes, 5 de noviembre de 2024

Triples 34

Fernando Cebrián (Bilbao, 15.05.1929 - Madrid, 30.01.2009)
Fernando Guillén (Barcelona, 29.11.1931​​​-Madrid, 17.01.2013)
Fernando Hilbeck (Madrid, 07.07.1933 - 18.04.2009)

sábado, 2 de noviembre de 2024

Memento mori

Taller de los Raxis, Angelito con máscara de calavera (Memento mori), retablo Mayor, iglesia de la Asunción, Priego de Córdoba, fuente: El Día de Córdoba (diario online), 31.10.22
¿Cuándo vendrá la muerte? No sabemos.
¿El cómo y el lugar? Ni en conjetura.
¿El detener su curso? ¡Qué locura!
Sólo es cierto y de fe que fallecemos.

Pues, ¿cómo la amenaza no tememos
del criador de toda criatura?
Deseche la maldad nuestra cordura
y el viaje del alma preparemos.

La muerte, aunque parece que se esconde,
cada momento nos está acechando;
dejémosla que siga y que nos ronde.

Ella va y viene, y nos está esperando,
y ya que nos oculta cómo y dónde,
estemos prontos para siempre y cuándo.

Diego de Torres Villarroel, ¿Cuándo vendrá la muerte?