Álbum de aves (Colección de 96 autoadhesivos), Panrico, 1972, página 3 |
et quantum est hominum venustiorum!
passer mortuus est meae puellae,
passer, deliciae meae
puellae,
quem plus illa oculis
suis amabat:
nam mellitus erat
suamque norat
ipsam tam bene quam
puella matrem,
nec sese a gremio
illius movebat,
sed circumsiliens
modo huc modo illuc
ad solam dominam usque pipiabat.
qui nunc it per iter tenebricosum,
unde negant redire quemquam.
At vobis male sit, malae tenebrae
Orci, quae omnia
bella devoratis:
tam bellum mihi passerem abstulistis.
o factum male, o miselle passer,
tua nunc opera meae
puellae
flendo turgiduli
rubent ocelli!
¡Llorad, oh Venus y
Cupidos,
y todos cuantos seáis
hombres sensibles!
El gorrión de mi
amada ha muerto,
gorrión, delicias de
mi amada,
al que ella amaba más
que a sus ojos,
pues era dulce como
la miel y la conocía
tan bien como una
niña a su madre,
y de su regazo no se
apartaba
sino que, dando
saltitos de un lado a otro,
a su única señora
constantemente piaba.
Y este ahora va por
un camino tenebroso
hacía allí de donde
niegan que regrese alguien.
Y que vosotras seáis
malditas, malvadas tinieblas
del Orco, que
devoráis todas las cosas bellas:
tan bello gorrión me
quitasteis.
¡Oh desdicha, oh
pobrecito gorrión!
¡Por tu causa ahora
se enrojecen,
hinchados de llorar,
los ojitos de mi amada!
Catulo, Carmine, 3 (trad. Lía Galán)
No hay comentarios:
Publicar un comentario